Autor Holly Bourne
Traductor: Laura Obradors Noguera, Bueno Bell
Editorial: La Galera, Sau
ISBN: 9788424665982
Idioma: Castellano
Número de páginas: 360
Hoy quiero compartir con ustedes mi experiencia de lectura de “Los lugares que me han visto llorar” de Holly Bourne. Desde la primera página, me di cuenta de que este libro no era solo una historia, sino un reflejo de las emociones que todos experimentamos en momentos difíciles. Bourne tiene una forma increíble de capturar la esencia del dolor y la sanación.
Los lugares que me han visto llorar es una narración que presenta dos líneas temporales desde un punto de vista en primera persona: una en el presente, donde la protagonista revisa sus recuerdos con Reese; y otra en el pasado, donde Amelie, una joven entusiasta y talentosa con grandes sueños musicales, llega a una nueva ciudad y a un nuevo colegio, forzada a mudarse tras el despido de su padre. Las dos épocas se distinguen mediante el uso de diferentes tipografías, lo que facilita identificar en qué línea temporal nos encontramos en cada momento.
La novela me atrapó desde el principio, y no pude dejar de leer hasta que no terminé la historia. La forma en que la autora narra la historia es vívida y cinematográfica, como si de una película se tratase. Me encontré identificándome con Amelie, una joven que se enamoró profundamente de Reese, solo para descubrir que su relación era tóxica y abusiva.
Lo que más me impresionó fueron los personajes. Se sienten tan reales y auténticos, que no pude evitar conectar con sus luchas. La protagonista, con sus vivencias de tristeza y desamor, me hizo recordar mis propias experiencias. Cada rincón que exploraban, cada lágrima que caía, resonaba en mi corazón, creando una conexión profunda entre su historia y la mía.
Amelie se encuentra allí dispuesta a recordar su historia y visitar todos los lugares donde él la hizo llorar. Está convencida de que solo así podrá comprender lo que ha sucedido y seguir adelante con su vida.
Sentada en un banco, Amelie reflexiona sobre todo lo que la ha llevado a este momento. Se siente devastada tras la ruptura con su novio, Reese, después de una relación que fue breve pero intensa. Sin embargo, ¿realmente lo que sentía era amor? ¿O simplemente había caído en una red de engaños y manipulaciones?
A lo largo de la narrativa, Bourne aborda temas importantes como la amistad, el amor y la superación. La forma en que los personajes enfrentan sus emociones y aprenden a lidiar con ellas me hizo reflexionar sobre mi propia vida. Al cerrar el libro, sentí que había pasado por un viaje emocional que me dejó no solo lágrimas, sino también una sensación de esperanza. Definitivamente recomiendo “Los lugares que me han visto llorar” a todos los que buscan una lectura que haga vibrar sus emociones y les recuerde que no están solos en su tristeza.
Bourne logra retratar con precisión las relaciones tóxicas y sus diferentes etapas, mostrando cómo el maltrato se infiltra de manera gradual pero profunda, así como reflejando los abusos psicológicos y sexuales que estas relaciones pueden implicar. Ha creado la historia de una adolescente que se aleja de su mundo anterior por lo que ella considera amor, mientras él se asegura de destruirlo todo. A diferencia de muchas novelas juveniles, esta obra no romantiza la sobreprotección masculina ni las conductas tóxicas; además, no culpa a la víctima.
En resumen, Los lugares que me han visto llorar es una narrativa dura pero esencial, con un mensaje poderoso: la violencia no se limita a lo físico, sino que el maltrato psicológico también puede causar estragos.
Hay días…en los que te das cuenta de que no eres tan fuerte, de que no todo lo aguantas, días en los que necesitas un mensaje, un detalle, una sorpresa…una llamada…un café a medias…media sonrisa y pocas palabras. Cuando eso ocurra, búscame.
