La chica del lago es una historia un tanto atípica para tratarse de una novela orientada a jóvenes. No esperéis un asesino en serie al que hay que atrapar ni un misterio que resolver. A raíz un este accidente, el padre de Jewel se fue de casa y ella tuvo que irse a vivir al campo con sus abuelos. Pero todo ha cambiado: ella es una joven introvertida y poco dada a hacer amigos, y su madre es casi una desconocida. Pero lo que parece no haber cambiado es el lago, donde su hermano murió.